Del paradigma del rock y su cualidad de autenticidad…
por: Bernardo Ameneyro | @nayoameneyro
#CoheedAndCambriaMx
La noche del pasado miércoles 4 de noviembre, asistimos gustosos a El Plaza Condesa para ser testigos de un concierto de rock completo, dentro de lo que podríamos considerar como cánones de lo que significa hacer rock, se cumplió el plazo para el regreso de Coheed and Cambria, banda estadounidense (NY) de rock progresivo que se encuentra en plena gira promocional de su disco “The Color Before The Sun”.
Los encargados de calentar motores fueron mis chingones de Apolo, banda de rock originaria de Chihuahua que también anda presumiendo por todas partes el disco “Guardián”, su más reciente material de estudio, producido por el multi-instrumentista e ícono de la música Omar Rodríguez López, con temas como: “Júpiter”, “Fariseo”, “Siddhartha”, “Guajura”, “Hiena”, “Loco (Lowiameju)” y “Catársis”, demostraron el porqué han llamado la atención de bandas consolidadas internacionalmente y en quienes han confiado para calentar motores y hacerles la chamba más fácil.
Como pocos en la escena del rock nacional, la banda integrada por Albar Alcántara (Voz), Iván Almanza (Batería), Santiago Villaba (Bajo) e Iván Sotelo (Guitarra), provocan la grata emoción de olvidarnos d ella teoría y entender la ambivalencia de hacer música ponchada ya que logran salirse de lo que en apariencia esta comprobado como exitoso en el gusto del público, hacen su desmadre porque así les gusta a ellos y al final termina encantado a las personas, sin duda uno de los actos en vivo más chingones del año.
Luego de una pausa necesaria para que el equipo de instrumentistas dejara todo al pedo para seguir sacudiendo la cabeza, la banda originaria de Nueva York, encabezada por Claudio Sánchez (voz y guitarra), se hizo presente en el escenario de El Plaza Condesa para reencontrarse con sus fans mexicanos quienes conectaron de inmediato con la banda integrada por Travis Stever (guitarra), Josh Eppard (batería) y Zach Cooper (bajo) quienes presentaron su octava producción titulada “The Color Before the Sun” donde se exploran emociones humanas donde es relativamente más fácil identificarse con estas nuevas historias.
Con un set list donde combinaron temas de reciente manufactura, cumpliendo el objetivo promocional, con otros más posicionados en el gusto del público mexicano: “Island”, “Eraser”, “Devil”, “The Crowing”, “Blood Red”, “World Of Lines”, “No World”, “33”, “Spirit Kid”, “Here To Mars”, “Favor House”, “Al The Killer”, “In Keeping”, “Ten Speed”, “Welcome Home”.
El oficio de una banda que sí hacen giras es evidente, la estructura de lo presentado arriba del escenario provoca asombro y más con las cualidades de un escenario como el de El Plaza Condesa donde las condiciones técnicas son inmejorables, las distorsiones, la potencia de los riffs graves de los bajos, la fidelidad de las baterías y la potencia de los riffs de las guitarras provocan una emoción muy singular, suma de adrenalina y endorfina , placer absoluto para los melómanos reunidos que gustan de la experimentación, riesgo y asustas nuevas como la de Coheed and Cambria y Apolo quienes demuestran que no hay nada escrito aún en lo que sea que signifique hacer rock, lo único que queda claro es que los que se llenan la boca con teorías musicales mercadológicas donde se da peso a lo que “sí le gusta a la gente”, cada vez que suben bandas como estas provocan más dudas que respuestas y justo ahí es cuando uno se enamora del sentido reaccionario, ponchado, salvaje, emocional, contestatario y potente de toque sea que signifique la palabra rock.
Apolo