Asalto a la nostalgia de una inocencia olvidada…
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por: Bernardo Ameneyro Esquivel | @nayoameneyro
Luego de esperar 4 años para volverlos a ver en el escenario del Foro Sol, los Arctic Monkeys, regresaron a la Ciudad de México para presentarse ante más de 60 mil almas la noche del pasado viernes 6 de octubre, en medio de una gran expectativa de por fin disfrutar de varias horas el acto En Vivo de la icónica banda de Sheffield que contó con el apoyo de invitados especiales.
Los encargados de saludar al público respetable fueron los Fontaines D.C., grupo irlandés de post-punk revival procedente de Dublín, Irlanda quienes rifaron arriba del escenario, cumpliendo por completo nuestras expectativas por sus buenas maneras, heredadas de la vieja escuela bien aprendida por Grian Chatten (Voz), Carlos O’Connell (Guitarra), Conor Curley (Guitarra), Conor Deegan III (Bajo) y Tom Coll (Batería), quienes tienen un respeto por click, sin caer en la cuantización extrema, mostrando un dinamismo y gran expresión arriba del escenario con un bajo mandón, adornos atascados y chilos en las guitarras, algo de psicodelia, armonías vocales por momentos profundas y algo obscuras por sus líricas que suponemos nacieron en solitario, a manera de introspección y que en el camino, aprendieron a ser compartidas por el aporte de cada uno de los miembros de la banda originaria del otro lado del charco, total y completamente influenciada por el sonido de la Gran Bretaña de hace 20 años.
Luego de una pausa perfecta para que el extraordinario y harto profesional equipo de instrumentistas, pusieran todo al puro tiro para que el grupo británico de rock alternativo Arctic Monkeys, compuesto por el guitarrista principal y vocalista Alex Turner, el guitarrista Jamie Cook, el baterista Matt Helders y el bajista Nick O’Malley, prácticamente con cronómetro en mano, salieran al escenario pasaditas las 9:00 de la noche para dar cuenta de un Foro Sol, prácticamente lleno.
Con un setlist de fuerte reminiscencia dosmilera, disfrutamos de una evolución notable, la visceralidad de una etapa inocente, que nos enganchó hace dos décadas, dio paso a un proyecto que podemos decir que se encuentra en su mejor momento, su calidad sonora es prácticamente impecable y se resume en una simple idea: Es un rock FINO.
Así, con temas como: “Sculptures of Anything Goes”, “Brianstorm”, “Snap Out of It”, “Don’t Sit Down ‘Cause I’ve Moved Your Chair”, “Teddy Picker”, “Crying Lightning”, “Tranquility Base Hotel + Casino”, “Why’d You Only Call Me When You’re High?”, “Arabella”, “Perfect Sense”, nos recordaron una etapa harto ingenua, creativa, desenfadada, propia de alguien que no espera nada de la vida y no espera nada de la misma, de ahí que logre conectar ahora con muchachada que tiene la mitad de edad que este viejo que les escribe y que ve con mucho gusto un nuevo ejemplo de atemporalidad con temas que la chamacada hacen propios como nosotros lo hicimos cuando las cervezas costaban si acaso $80 varos (creo), yo era muy feliz con putos $500 pesos en la bolsa.
Notablemente agradecidos y comprometidos con el público respetable, los músicos ingleses ya fuera con melodías salientes de piano, teclados atascados, uno de los mejores riffs de bajo del Mundo y claro la gran personalidad de su frontman, agasajaron al respetable, prácticamente sin pausas entre canción y canción, tapos es que tuvieran prisa, suponemos que es parte de la estrategia para mantener las emociones a tope: “The View From the Afternoon”, “Knee Socks”, “Pretty Visitors”, “Fluorescent Adolescent”, “There’d Better Be a Mirrorball”, “505”, “Do I Wanna Know?”, “Body Paint”.
Y como dice mi comadre la freski, llegó el el encore o entretiempo con el tradicional bajón de luces, con la primera amenaza de bajarse del escenario por lo que el público, aprovecho para saludar con las lucesitas de sus teléfonos móviles, tratando de organziar la ola y claro con el famoso grito de “otra, otra, otra”, arengando para que el maestro Turner y compañía, dejaran de fodonguear tras bambalinas y se dispusieran a cerrar una noche redonda con tres temas más: “Hello You”, “I Bet You Look Good on the Dancefloor”, “R U Mine?”.