Noche de Rock Británico en la colonia Condesa…
por: Bernardo Ameneyro Esquivel | @nayoameneyro
Fotos: Óscar Villanueva Dorantes / Cortesía
#TheMaccabeesMx
El inicio de semana idóneo, noche de lunes en El Plaza Condesa para ser testigos del regreso a escenarios mexicanos del quinteto de rock indie, originario del sur de Londres, Inglaterra The Maccabees, quienes andan en plena promoción de su cuarto álbum Marks to Prove It y la noche del pasado 5 de Octubre lo presentaron junto con temas del resto de su discografía, dando un buen repaso y demostrando porqué el trabajo de Orlando Weeks (voz), los hermanos Hugo y Felix White (voz y guitarras), Rupert Jarvis (bajo) y Sam Doyle (batería) es referente obligado de lo que se está haciendo del otro lado del charco.
La primera tanda correspondió a los discos Wall of Arms, Given to the Wild y por supuesto, Marks to Prove It con los temas “Wall of Arms”, “Feel to Follow” y “Kamakura”, respectivamente; el recibimiento por parte del público fue inmejorable, coreadas de principio a fin y con una gran escalada de emociones, el sonido fue impecable.
Para el tema “Young Lions” que al presentarla, recordaban que pertenece a su su segundo disco (Wall of Arms editado en el 2009), provocaron la primera gran ovación y descarga de adrenalina, el baile del público, ubicado en la parte frontal, ocasionó la primera cimbrada del foro.
Con la raza completamente en la bolsa, aprovecharon para agradecer su presencia y continuaron con “Love You Better”, acompañados por momentos por las palmas y los brincos de la mayoría, provocados por las distorsiones y los cambios de ritmo enérgicos de la batería que pensábamos que en cualquier momento la desbarataría Sam Doyle.
Luego de “Forever Ive Known”, se vivió un gran momento con “Something Like Happiness”, uno de los sencillos o carta de presentación del disco Marks to Prove It, ya nos andaba por ser testigos de la fractura en la estructura melódica tan característica de la banda, donde la primera mitad de la canción es interpretada con cierta cadencia que provoca un estado de contemplación absoluto, placentero, pero como es bonita costumbre en los ingleses, la exigencia y ruido llegan irremediablemente, sacudiendo y liberando todo sentimiento en el estribillo; una verdadera chulada, memorable por donde se escuche o vea…
“WW1 Portraits”, también de reciente manufactura, por el mismo caso, la escalada en las progresiones llegan a ser atascadas, viscerales, liberadoras; no era momento para respirar, por el contrario, era momento de bailar, alzar los brazos y liberarse con ”Precious Time”, un tema viejito, del disco Colour It In (2007)
Con la invitación previa a que todos brincarán, continuaron con “Can You Give It” una rolota del disco Wall of Arms, sin poner resistencia alguna, el público aportó gustoso la loquera que tenía fascinados a los ingleses y estos respondían con más provocaciones, ya fuera arengando con las palmas, gritos y miradas de complicidad absoluta, gran momento de comunicación tanto lírica como no verbal donde terminaron de ponerse al día.
Lo mejor estaba por venir, era obvio, con la emoción a tope y sonrisas de oreja a oreja de un público que sí puso atención la mayor parte del tiempo a lo que ocurría en el escenario, ciertamente diferente al que habitualmente prefiere verlo a través de una pantalla para documentar la noche con pésima calidad de pixeles; puro melómano que desgañitó y volvió a cimbrar el inmueble con el tema que le dio nombre a su más reciente producción: “Marks To Prove It”, gran momento.
Continuaron con “No Kind Words”, notablemente emocionados, continuaron con los agradecimientos, ahora para el equipo técnico de El Plaza Condesa quienes rifaron en cada detalle para que tronara con madre; lo anterior quedo claro con otro tema de los nuevos: “Spit It Out”, un aparente respiro que escaló en sentimiento e intensidad.
Luego de una breve pausa, nadie se movía de donde estaban ubicados, era momento del cierre y la gente sabía que se venía algo grande, expectantes y otros más haciendo memoria tratando de adivinar qué canción seguía, salieron de las penumbras dando por clausurado el entretiempo; “Slow Sun”, “Toothpaste Kisses” y “Pelican”, de los discos Marks to Prove It, Colour It In y Given to the Wild, respectivamente fueron los elegidos para terminar con un concierto memorable, de gran aprendizaje y harto divertido, seguro los vemos pronto…